¿NOS CRUZAMOS O NO CON EL NEARDENTAL?

Por Eloy Melero.

La ciencia ya se ha pronunciado al respecto. Lo que durante tanto tiempo se pensó era un hecho, ahora se pone en seria duda. ¿Realmente el homo sapiens se cruzó con el neandertal?

Los expertos aseguran que aunque realmente la respuesta fuera afirmativa, esa mezcla nunca hubiera afectado a la evolución de la especie resultante, y por tanto, que como fue el homo sapiens quien salió victorioso de ese enfrentamiento (porque casi seguro que al final lo hubo), no existe en nosotros ni un ápice de genética neandertal. Y eso que, tal y como nos dicen los genetistas, el neandertal poseía un genoma idéntico al nuestro en un 99,5 %.

En la última reunión de la Asociación de América por el Avance de la Ciencia (A.A.A.S. en inglés) en Chicago se pusieron sobre la mesa los avances en la secuenciación completa del extinto hombre de neandertal. A partir de fósiles procedentes preferentemente de la gruta croata de Vindija y el Sidrón asturiano, los expertos han analizado el ADN de las dos especies y alcanzado conclusiones que se refieren a actividades cerebrales relacionadas con el lenguaje, que distinguían a neandertales y homo sapiens de otras especies, tipo primates, que no compartían el denominado gen Foxp2. Lo que ha llevado a pensar a los científicos que los neandertales bien podrían haberse comunicado verbalmente con nuestros antepasados más primigenios. Aunque esto no pueda ser una garantía, por supuesto, ya sirve para dejar la puerta entreabierta.

Con todo, el director del proyecto, Svante Pääbo, advierte que “aún hay muchos genes del habla y el lenguaje por estudiar”, por lo que es pronto para afirmar, aunque no tarde para presuponer con cierto tino. Además, se ha descubierto un gen que tiene que ver con el desarrollo del cerebro de nuestro primo que aunque se ha visto en especímenes africanos, no se ha encontrado en las muestras fósiles del neandertal europeo. Y es lo que los grupos del propio neandertal encontrados hasta la fecha, ofrecían diferentes estados de evolución entre sí. Aspecto del todo fascinante en este punto de las investigaciones.

La empresa científica 454 Life Science Corporatin y el instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Leipzig, con Svante Pääbo a la cabeza, han logrado secuenciar mil millones de pares de bases químicas de ADN, y se han puesto como objetivo el aclarar definitivamente las relaciones sociales que existieron entre los homo sapiens y los neandertales, lo que servirá para clarificar a su vez los progresos evolutivos de ambas especies y los cambios genéticos que permitieron al ser humano traspasar las fronteras africanas y expandirse por el resto del planeta, hace ya unos cien mil años. Conociendo a nuestro primo neandertal, nos conoceremos mejor a nosotros mismos y sabremos qué es lo que nos hace humanos, por qué fuimos seleccionados por la naturaleza para salir triunfantes de ese posible cruce entre especies y hasta cuál podría ser nuestro futuro genético.

Otra cosa es que investigando estas secuencias genéticas puedan descubrirse esos motivos que produjeron la extinción del neandertal, que, como ya ha quedado claro, fue de carácter social o puede que ambiental. Aunque muchas pruebas apuntarían a que fuera el propio homo sapiens el que tuviera algo que ver.

Dicho esto, son muchos los que ya ven una realidad la clonación de un ejemplar neandertal, pero los expertos ya han garantizado que se trata de un mamífero extremadamente complejo. Quizá traer a la vida a un neandertal no sea posible tan a corto plazo como algunos creen.

Otra cosa es hablar de las implicaciones morales. Pero, esa es otra historia.